Déjalos a los pobrecillos hombre, que ante lo evidente, sólo pueden relamirse las heridas con la cabeza gacha y en silencio. Es lo que llevan haciendo toda la temporada, de hecho. De ahí lo del Canguelo y demás gilipolleces merengonas. Yo estoy deseando que nos "chorreen" en el Bernabeu igual que al Liverpool...