1. Vamos, novato. Sígueme.
Tras saltar del tren y leer con entusiasmo la frase que da inicio a la magia de Final Fantasy VII tendremos nuestro primer combate controlando a un tal "EX SOLDADO" que acaba sin apenas despeinarse con los dos soldados rivales. Avanzamos embelesados por el paisaje y nos encontramos con un pequeño grupo de insurgentes que forman el grueso de un grupo Eco-Terrorista (curiosa definición) denominado AVALANCHA. Un hombre de raza negra, un verdadero nigga de los barrios bajos, nos preguntará por nuestro nombre. Es en este momento cuando podremos comenzar a dar un toque más personal a nuestra partida.
--> Personalizando Final Fantasy VII
En mi caso recuerdo que la primera vez que jugué cambié todos los nombres de los personajes. Por supuesto a Cloud le puse mi nombre real mientras que al resto de los miembros del grupo les iba bautizando con nombres de mis mejores amigos. Afortunadamente fui sentando la cabeza con el tiempo y decidí que era mucho más épico que fuera Cloud, y no Rubén, quien salvara al mundo de la destrucción de meteorito
Otra de las cosas que siempre personalizaba en mis primeras partidas era el fondo de los menús y los diálogos. No creo que sea el único que ha realizado unas combinaciones de colores totalmente estridentes y de escaso gusto visual como esto (juro que no es mío).

Y tras decidir que lo mejor es dejar el juego tal y como viene de serie (más o menos, notaréis dentro de poco que he modificado ligeramente el color del menú para que se aprecie que las capturas son de mi cosecha) continuamos con la aventura.
Pediremos a nuestros compañeros que abran las puertas del reactor para acto seguido separarnos ligeramente de nuestro camino principal y recoger nuestro primer Plumaje Fénix del juego.
--> El Síndrome de Diógenes del jugador de Rol.
Se conoce como Síndrome de Diógenes rolero a esa actitud, prácticamente un estilo de vida, del jugador de rol por excelencia que, en juegos con sistema de almacenamiento de objetos prácticamente infinitos, se dedica a coleccionar items y consumibles varios como si en una semana tuviera que enfrentarse a todos los Final Boss de toda la saga uno detrás de otro y sin guardar.
Más definido como "podría tomarme aquí una poción, pero igual la guardo por si me hace falta dentro de un rato y es más necesaria", que al final siempre se traduce a estar ahorrando pociones para una supuesta emergencia que no llegará en la vida. Tener el inventario hasta arriba de objetos y no utilizarlos en la vida "por si las moscas" era tan común en mis partidas como "voy a guardar el límite para algún enemigo más tocho que me da rabia gastarlo contra este gusano de mierda".
Levanto la mano para presentar mi candidatura al rácano más insufrible del mundo. Dudo que en los 19 años que conozco FFVII haya utilizado más de 10 elixires en muchísimas partidas. Incluso en una ocasión me puse el reto de llevar en el inventario sólo 25 items en total y aun así acababa vendiendo todo lo que me sobraba porque no lo utilizaba nunca.
Saliendo de este juego y moviéndonos por el universo rolero en general puedo añadir otras hazañas como "voy a intentar llegar al Centro Pokemon con Charmander envenenado, que llego fijo, no vaya a ser que me arruine al utilizar un antídoto" o "para qué voy a comprar un item para curar la tristeza de mis personajes si tarde o temprano voy a descansar con ellos y todos los estados alterados van a restablecerse". En ocasiones me doy vergüenza de mi mismo.
Unos cuantos consejos que chirrían bastante dentro de la trama ("Cloud, no quiero que pienses que eres imbécil, pero necesito que sepas que tienes que presionar círculo para que podamos bajar en el ascensor"), unas cuantas escaleras y saltos por zonas derruidas (ShinRa no es una empresa perfecta, ya lo iréis viendo) y un recorrido que acaba siendo de todo menos seguro. Avanzaremos por el primer reactor hasta llegar al primer enfrentamiento serio de nuestra partida: El Guardián Escorpión.
--> Rbn, eres un incompetente, primera parte.
Siempre que me he enfrentado al Guardián Escorpión me ha ocurrido lo mismo, siempre. En cada uno de los enfrentamientos he tenido problemas con el "timming" del juego y me he comido su ataque con la cola láser.
Suelo jugar con el BTA activo de manera que si yo pierdo tiempo escogiendo mi siguiente acción el enemigo continúa atacando. De esta forma el juego me resulta mucho más divertido y por lo menos presenta algún reto para los que nos conocemos las estrategias a la perfección ya que cuando hay algún combate un poco más relevante suelo tomar decisiones bastante rápidas mientras la barra de BTA se va llenando de manera que, en cuanto tenga la oportunidad, pueda escoger la acción y ejecutarla a toda velocidad. Puede parecer una tontería pero si a día de hoy probáis a jugar con BTA pausada los combates son un verdadero coñazo con tanta pausa y con el enemigo esperando pacientemente a que tú realices tu ataque para mover ficha.
Al jugar de esta manera con el Guardián Escorpión siempre me ocurre lo mismo: aparece mi cuadro de ejecutar acciones, selecciono atacar... y antes de que Cloud o Barret ataquen al Escorpión al robot le da por interrumpir la acción y levantar su cola mientras Cloud grita eso de "¡No ataques mientras la cola esté arriba!".
Mis cojones. La acción está ya seleccionada así que, quiera o no quiera ataco. El Escorpión contraataca con su rayo. Pum. Mitad de vida a la mierda. ¿Os suena de algo todo esto? ¿Os ha ocurrido a vosotros?
--> Nadie se libró de la nefasta traducción. Nadie.
Suele ser motivo de risa por la red. La traducción de Final Fantasy VII en castellano es lamentable. Y para qué engañarnos, lo es.
Se ha entrevistado a una de las principales encargadas de la traducción quien, con toda la humildad del mundo, se justifica asegurando que ellos sólo tenían el script del juego, que no conocían a los personajes ni tenían constancia de las ambientaciones y de las situaciones, que la gran dificultad de traducir el juego consistió en que les dieron un montón de folios llenos de conversaciones que tuvieron que traducir como ellos imaginaron. Y aun así hay algunas cuestiones como las constantes faltas de ortografía (Allé voy) que señalan una desidia importante y que no acaban de estar resueltas, aunque ese es otro tema en el que no vamos a entrar.
Pero lo más gracioso es que los ingleses también tuvieron que sufrir una traducción más o menos similar. Y en esta ocasión era todavía más frustrante que nuestra versión PAL:

Efectivamente, en la versión NTSC del juego Cloud sugería a Barret que ATACARA cuando la cola estuviera en alto. Luego ya acababa de sincerarse y le señalaba también que tras ello contraatacaría con el láser.
Gracias, genio.
Derrotamos al Guardián Escorpión y salimos corriendo como alma que lleva el diablo. Porque son sólo 10 minutos los que tenemos para escapar. ¡10 minutos!
Tiempo más que de sobra para hacer lo que nos apetezca, equipar el nuevo arma a Barret, olvidarnos de rescatar a Jesse, dar vueltas para hacer peleas random y subir de nivel... Lo que nos apetezca. Y sin embargo durante la primera partida esos 10 minutos nos parecían un agobio constante. ¡No se para el cronómetro ni en los combates! ¡No voy a llegar!
Luego estamos aquellos idiotas que apurábamos al máximo esos 10 minutos para hacer el imbécil e intentar que la escena fuera lo más realista e impactante posible, forzar el crono hasta que quedaran apenas 5 segundos para salir por la puerta y disfrutar de la explosión del reactor "en tiempo real". Y no han sido una o dos veces en las que, por pasarme de listo, me he comido una batalla justo antes de salir perdiendo todo el progreso y teniendo que repetir toda la huída
.
Sea como fuere el gran Bum se produce y... mucha gente muere.
Mucha.

Hay bastantes debates en internet al respecto de la ética de Avalancha en sus atentados. Efectivamente el propio juego señala que con la explosión del Reactor han ocurrido numerosas bajas de gente inocente y que estas podrían haberse evitado actuando de otra forma. Es un bonito debate en el que han corrido ríos y ríos de tinta. Lo que sí parece claro es que Barret y su grupo Eco-Terrorista no son precisamente angelitos de la caridad.
Llegamos al Bar El Séptimo Cielo para encontrarnos con Tifa y recibir nuestro jornal de mercenario. Es en este momento cuando el minijuego de la Cita de Gold Saucer que mencionaremos más adelante empieza a cobrar importancia, dependiendo de a quién entreguemos la rosa que hemos comprado previamente a Aeris (si es que lo hemos hecho, claro) nuestra afinidad con Tifa aumentará o disminuirá. Pero como comento, todo esto es menú para otro día.
Los recuerdos de la promesa en el pozo, bla, bla, bla... Y continuamos con nuestra colaboración con Avalancha por la suculenta cifra de 2.000 Gil.
--> A vueltas con la traducción (bis)
En esta parte del juego hay algunos errores de traducción graves como una conversación entre Tifa y el protagonista en el que se da a entender que Barret y Cloud se conocen desde pequeños y llevan toda la vida peleándose cuando en realidad se conocen desde hace muy poco. Igualmente, aunque no sea precisamente en este momento, durante todo el desarrollo del juego en el área de Midgar hay algunos mensajes mal traducidos que han ido generando una serie de "leyendas urbanas" con las cuáles los aficionados a FFVII han podido debatir arduamente.
Amanecemos al día siguiente con unos suburbios en plena actividad y con uno de los insufribles tutoriales que nos brinda el juego en la "Sala de los principiantes". Aquí podremos perder muchos minutos entre farragosas explicaciones que en ocasiones no dicen gran cosa. Y también podremos ganar una materia Todos que nos vendrá bastante bien en el futuro (y que yo no supe utilizar en mi primera partida porque no llegué a entrar nunca en esta sala
).
Pese a todo lo relevante que se nos puede decir en esta habitación merece la pena detenerse para hablar de lo más importante de todo. Cuando ya llevamos media hora de juego y estamos acostumbrados a los botones... viene un perro y nos hace un resumen. ¡Un perro! Y para colmo explicado de aquella manera como "arriba izquierda derecha: caminar hacia abajo" 

Abandonamos los suburbios para adentrarnos en un tren en el que saltarán las alarmas y deberemos escapar en una absurda cuenta atrás que refleja lo inútil que es la administración ShinRa en cuestiones de seguridad. Como he dicho la cantidad de veces que vamos a sacar los colores a esta gente va a ser incontable a lo largo de la aventura.
--> ¡Al ladrón!
Durante esta huida un ladronzuelo aprovechará para saquearnos 100 Gil de nuestro bolsillo. En ningún momento el juego nos notificará que hemos sufrido un hurto y lo más normal es no darse cuenta de lo que ha ocurrido y seguir adelante (puesto que tenemos una cuenta atrás que nos está metiendo prisa).
Si nos damos cuenta de que nos han robado tendremos que retroceder ligeramente hasta el final del vagón para encontrarnos con el ladrón, interactuar con él y escoger la opción "Es cierto" para que ese dinero regrese a nuestra cartera. Lo más gracioso es que en ningún momento vamos a recibir notificación de que algo ha cambiado, al igual que no sabemos que nos han hurtado dinero tampoco vamos a saber que nos lo ha devuelto.
Por ello lo más habitual es que ningún jugador que no conozca de antemano lo que acaba de ocurrir en este momento se de cuenta de nada.
Saltaremos del tren y deberemos colarnos en el Reactor número 5 para colocar una nueva bomba, atravesaremos de nuevo las diferentes zonas y llegaremos hasta el núcleo del Reactor para tener un pequeño flashback en el que Cloud rememorará tiempos remotos de sus primeros pasos en "SOLDADO" y un viaje que realizó a su pueblo natal que no acabó precisamente bien. Pondremos la bomba y huiremos...
Para llegar a un minijuego realmente estúpido.

Un minijuego que no aporta en absoluto a la trama ni es divertido jugablemente. Un minijuego que frustra a todos porque simplemente hay que tener la suerte de pulsar el botón de acción coincidiendo con el momento en el que Barret y Tifa levantan sus brazos, sin ningún indicativo ni señal que nos pueda hacer intuir cuál es el momento correcto. ¿En qué momento a SquareSoft le pareció que podría ser divertido esto?
Abro paréntesis para volver a valorar la inutilidad de ShinRa como institución: Por el momento ha permitido que nos colemos en un reactor de energía simplemente moviéndonos por unas alcantarillas, hemos puesto ya hasta 2 bombas sin que a nadie parezca preocuparle, hemos evitado zonas derrumbadas en sus instalaciones, hemos recorrido tubos y cañerías sin la mínima seguridad y hemos descubierto que para abrir una puerta de alta seguridad hacen falta 3 personas que sepan contar hasta 5. No son lo más competente del mundo, no.
Aunque en esta ocasión sí que van a demostrar algo de astucia, nuestra vía de escape se verá frustrada cuando nos demos cuenta de que todo ha sido una trampa urdida por el Presidente ShinRa (que no tiene nombre, es el Presidente ShinRa, punto) y nos presente al "Soldado del Techno" 
--> Ataques críticos por la espalda = Muerte
Rompe-Aire, el enemigo al que nos enfrentamos, tiene una debilidad muy importante y es que los ataques por la espalda le dañan aun más que a otros rivales a los que nos enfrentemos. Mientras que un ataque por la espalda normal a cualquier enemigo causa daño x2 a Rompe-Aire estos ataques le causan daño x5.
Un ataque límite de Cloud o de Barret (que son los más fuertes en este momento) realizado por la espalda y que, con un poco de suerte, llegue a ser crítico, puede conseguir esta brutalidad:

Rompe-Aire tiene sólo 1200 puntos de VIT. Sobran las palabras.
Acabamos con Rompe-Aire con catastrófico resultado. En la explosión Cloud cae al vacío y se pierde en la penumbra de los suburbios... Pero esto lo dejamos para el Capítulo 2.
Os toca a vosotros. ¿Qué recuerdos os trae este primer capítulo? ¿Hay algo que añadiríais a lo ya relatado?
Editado por rbn_psx, 17 diciembre 2017 - 12:46 .