Michael Patcher tiene claro que Xbox One se venderá sin Kinect

Desde que se enseñó Xbox One al mundo el pasado abril no han sido pocos los debates y especulaciones sobre un modelo de la consola sin Kinect, totalmente posible pero que a Microsoft nunca ha convencido. Para la multinacional, su consola de nueva generación ofrece la experiencia de juego completa con el periférico y es un accesorio tan importante como el mando o el cableado, por lo que es imposible una XBO sin Kinect.

Hoy Michael Patcher, uno de los analistas de la industria bajo el sello de Wedbush Morgan Securities, más conocido por sus predicciones a menudo lógicas o bastante sonadas, ha expuesto que está seguro de que "Microsoft finalmente cederá" y reconsiderará la obligatoriedad del dispositivo para el juego. Patcher se apoya en que, según él, las third party no sacarán partido a la cámara ni al micrófono del aparato por lo que perderá en cierto modo su papel de pieza esencial en la experiencia de juego con One.