Los 9 momentos más emotivos del Videojuego
Intensos, lacrimógenos, sobrecogedores, inolvidables. Hemos vivido muchos momentos pad en mano, pero estos son los que nos han marcado, los que siempre recordaremos por su emoción absoluta.
Los momentos más emotivos del videojuego
Los que dejaron Huella
The Last of Us + Left Behind
Convertido hace mucho en un medio narrativo más poderoso que el Cine por su capacidad de inmersión, el Videojuego nos ha dado decenas, cientos de momentos emotivos intensos, subyugantes y que por una u otra razón nos han llegado muy adentro y nunca olvidaremos. Ciertamente nos ha dolido tener que cribar, pero para este primer volumen hemos escogido estos 9 ejemplos, empezando por The Last of Us. Básicamente una montaña rusa emocional, a los 10 minutos asistimos a un prólogo de final devastador, y de ahí hacia arriba, quitándonos a las pocas horas un querido personaje secundario en un momento tan emotivo como inesperado. Y desembocando todo en un final de esos que enciende los foros y blogs de comentarios. Esa escena entre Joel y Ellie nos deja vacíos, devastados porque esto no es Hollywood, y no existe un ‘Happy Ending’ al final de la historia. Pero para siempre quedará la relación de los dos, la mejor entre personajes que se recuerda. Y en Left Behind la de Ellie y Riley, capital para entender a la compañera de Joel y su estado al empezar The Last of Us. Un juego que al que le ha bastado una sola entrega para dejar una huella profunda en muchos de nosotros.
Fidelidad Animal
Once años ya, y aun conservando una fuerza, poesía y sentimiento tan grandes como los colosos que le dan nombre, Shadow of the Colossus jamás perderá un ápice de su maestría, por más que a nivel gráfico pueda parecer desfasado. La historia del sin nombre y su desesperación por devolver la vida a su amada está llena de una épica sombría que presagia un final dramático (y francamente inesperado). Pero para momento de hacer saltar la emoción, aquél en el que de repente, tras horas y horas a su lado, perdemos al compañero que ha sido lo único fiel que hemos tenido al lado en un momento de absoluta tensión que desemboca en tristeza dentro y fuera de la pantalla. Hace 11 años ya, pero nunca olvidaremos el nombre de Agro.
Marido y Mujer para Siempre
Los que no hayáis jugado, estaréis pensando “¿Un juego de marines machotes rocosos descuartizando aliens aquí?” Pues sí, porque Gears of War es también un juego de seres humanos resistiendo contra un invasor que los oprime a ellos y a sus familias. Sinceramente, el momento en que Dom encuentra a su esposa Maria en la secuela es tan brutal, tan impactante, tan bien montado, musicado e interpretado por un actor que derrocha sentimiento en toda la escena, que sigue poniendo el corazón en un puño al verla incluso aunque nunca se haya jugado. Sobre todo cuando nos ponemos en su piel y pensamos “¿tendriamos los huevos de hacer eso por la persona que amamos?” Pues Dom lo hizo.
La Peor Decisión
Aún recordamos agosto de 2013, ese verano del Summer of Arcade de Xbox 360 en el que estrenaron Brothers, un juego con un esquema original en el que con un solo mando controlábamos a la vez a dos personajes, dos hermanos que han perdido a su madre de forma trágica y que deben cooperar para no perder a su padre también. El sentimiento de tristeza y de pérdida es palpable durante toda la aventura, pero nunca en la vida nos esperaríamos aquello por lo que el juego es recordado: Un tramo final en el que se nos plantea lo imposible. No es un momento emotivo, es un momento trágico, lacrimógeno, devastador, y que pilla de sorpresa al usuario, aumentando así su dramatismo.
“¡MI NOMBRE ES JOHN MARSTON!”
Tan perfecto que muchos llevan seis años pidiendo una secuela, Red Dead Redemption no es sólo una obra maestra jugable y el mejor western virtual de la historia, sino que puede presumir de tener un instante tan épico como apocado al fracaso. Porque sabemos lo que va a pasar, está claro, pero aún así Rockstar nos da el control del inmenso John Marston y nos dice “VIVIDLO, sentidlo por vosotros mismos”. Y vaya si lo hacemos. Desde luego, si algún día el Clint Eastwood de Sin Perdón o el James Mangold de El Tren de las 3:10 a Yuma hiciesen un juego del viejo Oeste, seguramente pondrían un momento así, tan emotivo como épico, y culpable de que Red Dead Redemption se haya agarrado a nuestro recuerdo de esa forma.
Lluvia de Sentimientos
En un juego que ya exhibía un tráiler conceptual –el poderoso The Casting- que dejaba al espectador impactado y mudo, estaba claro que momentos intensos y emotivos iba a haber. Pero es que básicamente todo Heavy Rain es una gigantesca experiencia dramática por la que se pasean personajes marcados por la tragedia, la culpa, la obsesión o el vacío. Porque desde ese prólogo en el que sentimos de manera tan visceral lo que es perder a un ser querido, Heavy Rain compone un título que no terminará precisamente como Uncharted o Super Mario 3D World. Para unos un juego, para otros una película interactiva, lo cierto es que si algo es la divisoria obra de David Cage es una experiencia que no se parece a nada, al menos cuando se estrenó.
Sentimiento de Culpabilidad
El Sueño más Hermoso
To The Moon
Si algo han demostrado ejemplos como Undertale, Braid o Limbo, es que no se necesita el presupuesto más alto o la mejor tecnología para conseguir una experiencia emocional. De hecho en ese terreno los Indies son maestros y reyes por la libertad y ganas de experimentar que tienen. To the Moon es de esos que se beneficia del boca a boca, hasta que te lo compras, lo juegas –aunque sinceramente jugar, lo que se dice jugar, poco- y vives por ti mismo un título que es puro sentimiento. Se trata de revivir una vida de alguien que se está muriendo y sólo quiere una cosa: Ir a la Luna. Se trata de revisitar decenas de momentos en su vida, una vida ordinaria en la que no hay peleas heroicas o amenazas mundiales. Solo una vida, y la búsqueda de un motivo, de la fuerza que impulsa ese último deseo. Una celebración de la vida en formato jugable que deja un agridulce sabor al final.
Por Amor
Tras el fallido experimento de Jurassic Park The Videogame, ciertamente no dábamos mucho por la siguiente aventura de Telltale a pesar de usar la licencia de The Walking Dead. Grave error, puesto que ese año el estudio consiguió un título que a nivel jugable dividía, pero que a nivel de guión era soberbio, sin fisuras, perfecto. Y decimos perfecto porque hay que quitarse el sombrero ante la forma en que construyeron la relación entre los dispares Lee y Clementine desde ese encuentro con él en la casa y ella en off. Durante 5 episodios los vimos convertirse en inseparables, vimos a Clementine madurando a golpe de apocalipsis zombi, a Lee cuidando siempre de ella. Y por ello el final del Episodio 5 es devastador, es brutal, directo como una bala y revestido de una solemne intensidad que desemboca en llanto para todo el que lo ha vivido y se ha dejado contagiar por la hermosa relación de dos personajes que, al igual que Joel y Ellie, nunca olvidaremos.