Bloodborne, Impresiones

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Esta semana ha sido una fecha muy especial para la marca PlayStation. Nada menos que veinte años en el mercado desde que el primer sistema asentó las bases del salto de los píxeles y las 2D a los polígonos y las 3D. Dos décadas de magia que Sony homenajea y celebra durante esta semana. Y si hoy ha arrancado el PlayStation Experience en Las Vegas, el jueves pudimos echarle un vistazo a 4 juegos de PlayStation 4 que saldrán en 2015. 4 experiencias diferentes que probamos en un marco victoriano no exento de calaveras, tumbas y sonidos del más allá. Desde luego el sitio ideal para el Triple A Bloodborne, que en un sótano entre calaveras, velas y objetos rituales nos enseñó más en profundidad su apartado Multijugador. Seguimos con este PlayStation Experience, ahora sumergiéndonos en la nueva pesadilla de sangre y muerte de From Software.

PlayStation Experience

Bloodborne

Sin duda lo más esperado de PlayStation 4 junto a Uncharted 4, la enorme ovación que toda la prensa europea que se congregó en Londres el jueves pasado le dio a Hidetaka Miyazaki cuando subió al escenario, sin duda certifica las ganas que los fans de la serie Souls de From Software le tienen al sucesor espiritual de ese Dark Souls II que este año nos lo ha hecho pasar tan mal, o sea, tan bien en realidad con el pad en la mano. Esperábamos nuevo material para ver y jugar en este Experience de Londres, y lo cierto es que lo tuvimos al 50%. Es cierto que hubo nuevo material, el Chalice Dungeon que habéis visto hoy durante la conferencia Sony en Las Vegas, pero el código jugable presente era el mismo de la Alpha de hace unas semanas aunque técnica y gráficamente más pulido y mejorado aquí y allá, como en el detalle de los mensajes y notas que surgen del suelo.

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Para el que aún no lo sepa, Bloodborne se inscribe en la escuela Action-RPG de la serie Souls, aunque From Software quiere conseguir que parezca tanto familiar a los usuarios como a la vez distinto de la serie mencionada. Esta aventura por una Europa mezcla de época victoriana y medieval, de fantasía y realidad con la muerte y la podredumbre de cadáveres de la Peste y criaturas demoníacas, posee en su código base un ADN más agresivo y visceral totalmente acorde a su ambientación, como su creador nos explicaba en una entrevista. Pero primero vamos a hablar de su propuesta multijugador y las mazmorras de desafíos que nos ofrece la experiencia.

Como Miyazaki-san comentaba, se trata de un nuevo escenario con otro tipo de iluminación diferente al que vimos en el código Alfa  y que nos enseñaba la ciudad de Yharnam. Nada más empezar ya tenemos un conato del multi al ver a un caballero blanco en la parte superior que desaparece en busca de su propia fortuna y riesgo. Estamos en el Chalice Dungeon, un tipo de mazmorras procedural, que bebe del concepto Rogue Like implementando elementos de generacion aleatoria, por lo que  el dungeon nunca será el mismo ante nuestros ojos, “siempre estara cambiando su forma” según Hidetaka, dependiendo del cazador que llevemos y el objetivo que nos aguarde. Tras atravesar unos pasillos y esquivar una bola rodante al estilo Indiana Jones, llegamos a una caverna subterranea en la que peleamos contra una variedad más supurante de esos enemigos de la serie Souls que se arrastran por el suelo, pero enseguida , apenas matar a estos, nos toca lidiar con una especie de troll mucho más grande grande con un arma flamigera.

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Llegados a este punto vemos que el cazador negro no nos ayuda,  pasa de nosotros y va a lo suyo, pero el blanco que vimos nada más entrar viene a echarnos una mano. Y con él el combate se torna un dueto de golpes y esquives hasta que derrotamos al a criatura. Seguimos juntos, ya que este no se separa de nuestro lado, y avanzamos por la mazmorra buscando unos elementos que en este modo del juego se consideran como misiones, los Activation Points, que deben ser encontrados si queremos activar otras partes del dungeon y seguir avanzando/progresando/sobreviviendo. En la demo vemos que activan uno, lo cual nos lleva a una estancia cerrada circular similar a un coliseo. Y dentro de ella una enorme bestia a modo de Final Boss que nos espera para matarnos con alguna de sus cuatro patas o su aliento de fuego.

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Ahora es cuando el caballero negro viene a apoyarnos, por lo que somos tres enfrentándonos al Jefe Final. Algo útil de cara a la duración del combate, pero en materia de esquivar y golpear, la dificultad del encuentro no se reduce un ápice. La idea de From Software es usar el concepto de PS4 y Share, compartiendo en este caso la partida en grupo, dando la oportunidad a un grupo de amigos de juntarse y compartir una partida dentro de un dungeon, cada uno por una parte, juntandose para enemigos mayores o permaneciendo juntos. De hecho, Miyazaki nos dio el truco en la entrevista para lograr que jugásemos con nuestros amigos y no con extraños, si compartimos la mazmorra de desafío solamente con los contactos que queremos, ya que si no el sistema de matchmaking se encargará de juntarnos con usuarios de todo el mundo.

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Con los dungeons tampoco se buscan que sean lineales. Si es necesario, podemos mantener a los bichos que encontremos ‘encerrados’ en sus lugares, dejarlos allí, jugar en otra parte o modo para ir subiendo las estadísticas y armamento del personaje, y volver al sitio en el que fuimos derrotados a por el rival que se nos resiste. La intención de los creadores es también la de que nos podamos hacer una idea de lo que vamos a encontrar en las mazmorras, de tener expectativas, pero la realidad es que nunca estaremos seguros de lo que vamos a encontrarnos en la oscuridad de allá abajo.

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Pero seguro que muchos os seguís preguntando por elementos como la nueva ambientación, el cambio de época, las novedades, alteraciones y posibilidades en la jugabilidad. Hidetaka Miyazaki nos contó que existen tres razones por las que Bloodborne es Bloodborne y no un Dark Souls III o un Demon's Souls 2. La primera es la de poder ofrecer un gameplay distinto de la serie Souls en cuanto a combates, con un personaje más agresivo y un escenario que huye de la Fantasía medieval de anteriores Souls. La segunda es su intención de incluir armas, aunque de las primeras, de las poco sofisticadas y sí muy peligrosas, luego la época victoriana se presentaba ideal para cumplir esto. Y la tercera es la de querer demostrar el poder de PlayStation 4 para crear entornos, lograr una gran calidad visual y reflejar algo más complejo.

Pero sigue habiendo una pregunta más flotando por el ambiente: Las criaturas, los enemigos sedientos de nuestra sangre que vienen a por nosotros. Como nos confesaba, Miyazaki –san es un gran fan de las obras de H.P. Lovecraft, del Drácula de Bram Stoker o del Sueño de Fevre de George RR Martin,  y su pasión por el concepto de los vampiros viene de sus gustos, que incluyen también el mítico juego de rol de lápiz, papel y dados Vampiros: La Máscarada (aunque no entró en detalles sobre qué raza prefería, y qué bando, si el Sabbath o La Camarilla).

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