Excelencia en multijugador

Puede que algunos lamenten haber perdido la experiencia del juego original en Playstation, que con sus "humildes" gráficos poligonales conseguía recrear un conflicto bélico a gran escala con docenas de enemigos y gigantescas plataformas voladoras. El Warhawk actual es radicalmente distinto, pero a pesar de eso consigue convertirse en una excelente oferta dentro del catálogo de PS3 con sus propias argumentos.

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Ahora la premisa es la de utilizar un terreno virtual con espacio hasta para 32 jugadores en el que puedan enfrentar en encarnizados combates usando todo tipo de armas, estructuras y vehículos, tanto aéreos como terrestres. Los que hayan podido probar títulos como Battlefield ya pueden hacerse una idea aproximada de la mecánica general y básica de esta oferta, pero es algo tan genérico y amplio, todo un subgénero, que tiene muchas formas de interpretación y ejecución.

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Afortunadamente para Warhawk se ha elegido una que definitivamente funciona. Sin complicaciones ni muchas ceremonias: elegir uno de los dos bandos -que aquí aparecen sin ningún contexto o explicación y que no presentan diferencias entre ellos-, crearse un personaje usando el editor y saltar inmediatamente a la acción. Es un juego que vive para la acción y facilita considerablemente que cualquier jugador pueda saltar de inmediato a una partida y comenzar a aniquilar contrarios.

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Cada uno de los cinco mundos presentes en este título compone un enorme campo de batalla con su orografía, bases, mini-bases... se nota que se ha invertido un gran trabajo en cada uno de ellos y no se trata de simples mapas, ya que cada uno presenta zonas abiertas en donde cabe la guerra total, zonas de bosques en los que es fácil tender emboscadas a las unidades aéreas, ciudades llenas de esquinas y lugares estrechos que invitan a bajarse del vehículo y seguir cuerpo a cuerpo con algunas de las nueve armas personales que hay disponibles.

Sin duda, el valor más sólido aquí reside en un paquete extremadamente sólido y muy divertido. Si lo único que se busca es diversión rápida, sólo hace falta conectar el juego, lanzarse en cualquiera de los servidores y empezar a jugar. Si en cambio lo que se busca es una experiencia con varios amigos o con un clan, este título tampoco decepciona y presenta soluciones muy versátiles, incluyendo la posibilidad de utilizar una PS3 como un servidor propio, establecer claves, limitaciones de acceso para que sólo jugadores de cierto perfil puedan entrar... todo de forma muy fácil e intuitiva, por lo que incluso aquellos que no tengan una gran experiencia con este tipo de características -más comunes en el mundo del PC- puedan realizarlas sin mayores problemas.

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Gráficos y Audio

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Incognito ha hecho un notable trabajo con los gráficos de Warhawk, de forma que han quedado a la altura de lo que se puede esperar de una máquina de nueva generación sin meterse en camisas de once varas. Los personajes están bien detallados y permiten suficiente personalización como para mostrar una gran variedad y que cada uno lo pueda sentir como propios. Los vehículos presentan un aspecto detallado y atractivo, a la vez que la destacable física alrededor de todos los objetos permite que las explosiones e impactos tengan esa contundencia que tanto gusta.

Los escenarios, además de grandes, también son variados y además muy verticales, ya que los vehículos aéreos tienen capacidad de volar realmente alto, lo que expande considerablemente las posibilidades de combate en ellos. Posiblemente sean las nubes volumétricas las que constituyan el aspecto más llamativo de cualquier partida, ya que constituyen un elemento que llena la pantalla con su atractivo y su comportamiento. La sensación de quietud que a veces se puede experimentar con un Warhawk en el aire se debe e exclusiva al excelentemente recreado cielo, aunque los momentos de paz son extremadamente raros en medio de la intensa contienda.

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También detalles como los efectos especiales han sido cuidados para asegurarse que los que consigan abatir al enemigo lo hagan de una forma que los deje plenamente satisfechos. Como ya se ha comentado, se trata de una obra en la que no se han escatimado esfuerzos para que quede bien presentada en todos sus apartados, por lo que es difícil encontrar pegas a la presentación.

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También la música, potente y capaz de disparar la adrenalina, cumple a la perfección con su cometido de dar ambientación y fuerza al juego. Pero más que las propias composiciones lo que más destaca son los efectos de audio, que retumban con furia en los altavoces y recuerdan permanentemente que este es un título de acción y de guerra sin cuartel, por lo que la rotundidad de los mismos está más que justificadas.

Jugabilidad

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Encontrar qué es lo que hace divertido a un juego y qué funciona en su contra no es siempre tarea fácil ni obvia, pero en Warhawk es fácil localizar los elementos principales que forman el núcleo de su capacidad para atrapar y hacer que las horas pasen inadvertidamente combatiendo con jugadores de todo el mundo. Esos elementos son: variedad, velocidad y un diseño extremadamente robusto, que hace que la combinación de armas, vehículos y situaciones encajen de forma que garanticen que el combate siempre es intenso y divertido.

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Hay cinco modos de juego: Deathmatch, Deathmatch por equipos, Capturar la Bandera, Nodos y Combate Aéreo. El primero es el clásico todos contra todos mientras que el segundo ofrece el habitual enfrentamiento entre equipos. Capturar la Bandera tampoco ofrece elementos que lo diferencien de otros títulos, aunque se beneficia ampliamente de las características propias de Warhawk. Nodos es posiblemente el modo más táctico y cooperativo, ya que propone a cada uno de los dos bandos capturar diferentes bases en el mapa para conseguir territorios y bonificaciones. Esas bases están intercomunicadas, de modo que capturar y mantener esos territorios permite un aumento de puntos y una mayor selección de armas; el objetivo es llegar a los puntos marcados antes que el rival. Por último, está la opción del juego aéreo, que a su vez se divide en Deathmatch y Deatmatch en equipos, puesto que aquí se lucha exclusivamente en el aire.

Siendo los vehículos aéreos la esencia del original, uno de los primeros detalles interesantes es comprobar cómo funcionan aquí y cuál es su peso en el campo de batalla. La respuesta a esa cuestión se podría responder conque es considerable, aunque no es obligatorio surcar los cielos para tener un gran peso en la partida. Incognito se ha cuidado bien de que no haya elementos desequilibrantes dentro del fino ecosistema que han creado. Su manejabilidad es excelente, es posible invertir los controles para los que lo prefieran de ese modo y además la opción de controlarlo con el sensor de movimiento del SIXAXIS o con los sticks está abierta a las preferencias de cada usuario.

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El SIXAXIS funciona bastante bien, y aunque la curva de aprendizaje es más pronunciada de ese modo, presenta la ventaja de que permite una mayor libertad y capacidad de reacción a la hora de manejar el Warhawk, especialmente a la hora de intentar movimientos complejos en el aire, que es toda una necesidad cuando se está en el cielo con otros 31 naves intentando despedazarse mutuamente y usando misiles, ametralladoras e incluso minas aéreas. En su contra está que no es excesivamente preciso, lo que es una clara desventaja en lugares estrechos; los sticks ofrecen más seguridad y control, por no hablar de familiaridad.

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En los demás aspectos está todo medido al milímetro. La velocidad de juego es rápida pero no mareante, cada vehículo y arma presenta sus ventajas e inconvenientes, cientos de opciones tácticas tanto individuales como en grupo, excelente control, soporte de juego por voz... tiene además excelentes detalles como el reducir o aumentar de forma racional el tamaño de los mapas en función del número de jugadores que haya en la partida, lo que es excelente para evitar que los amplios mapas acaben aburriendo a grupos pequeños que tarden demasiado en encontrarse y pasar a la acción.

También las opciones de configurar servidores y facilitar el juego en grupo o en clanes. Con una buena conexión y una PS3 como servidor, los grupos que se lo puedan permitir tendrán un servidor privado para ellos solos con sus correspondientes claves. También ofrece muchas facilidades para el juego en línea, con opción de partir la pantalla hasta en cuatro partes para que la infraestructura no se dispare -aunque es más recomendable dejar la pantalla en dos, ya que sólo televisores de gran tamaño permiten una visualización cómoda a cuatro partes- Para los que busquen algo más de variedad, tienen la opción de permitir que el servidor sólo admita a jugadores de un determinado nivel.

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Warhawk cuenta con su sistema de seguimiento de estadísticas personales, que mide los éxitos y la actuación de cada jugador y que le permite ganar niveles; esos niveles sirven únicamente a modo de medir el prestigio y la experiencia, además de abrir la posibilidad de equipar al personaje con nuevos elementos cosméticos acordes con su rango, pero no establece ninguna diferenciación de base entre los participantes. De ese modo se asegura tanto que los expertos puedan garantizarse el nivel y ritmo de partida que desean y que los principiantes no se sientan intimidados en sus primeros compases.

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