El mal más divertido...

En sus inicios cinematográficos, el ahora famoso y aclamado director de Spiderman, Sam Raimi, creó una trilogía de humor y terror que causó furor entre los no pocos aficionados que la siguen adorando a pasar de los años pasados. Respondiendo al nombre de Evil Dead ('Posesión infernal', 'Terroríficamente muertos' y 'El ejército de las tinieblas' en nuestro país), nos presentaban las desventuras de Ash con el Necronomicom, el libro de los muertos.

Si no tienes miedo a los espiritus descubre Evil Dead: Regeneration en este vídeo.

Los años han pasado y, con el tiempo, se empezaron a desarrollar los primeros juegos basados en esta saga cinematográfica tan querida por los aficionados al cine de terror. Sin embargo, Hail to the King, la primera incursión en forma de survival horror, fue una sonora decepción. Posteriormente vería la luz A Fistful of Boomstick, que tendería más hacia el beat'em up, y el resultado fue muy superior.

Ahora llega a nosotros Regeneration, un nuevo beat'em up que nos vuelve a poner en la piel del héroe Ash, con nuevos poderes y personajes. Todo un giro de tuerca al argumento de las películas que prometía ser toda una revolución en la saga y ser el juego definitivo de Evil Dead. Bueno, no ha llegado a tanto, pero sí que se trata del mejor juego basado en la obra de Sam Raimi y ofrece grandes dosis de diversión y humor.

Como cabría esperar, esto desató de nuevo al mal, provocando el caos, la confusión y la invasión de los muertos en el asilo en el que Ash se encontraba recluido. Como no podía ser menos, el protagonista de toda esta historia, haciendo gala de su habitual chulería, se dispone a volver acabar con toda criatura maligna que se encuentre a su paso.

Sam es inmortal, por lo que Ash podrá abusar de él todo lo que quiera, ya sea lanzándolo contra los enemigos, metiéndole por pasadizos oscuros y peligrosos, haciendo que le posean espíritus o incluso, por diversión, lanzarlo a un ventilador y ver cómo se despedaza para luego volver a su lado como si nada hubiese pasado. Gracias a su arrebatadora personalidad, se trata del compañero perfecto para el carismático Ash.

A diferencia de Hail to the King, aquí ambas armas son ilimitadas, algo lógico tratándose de un beat'em up desenfrenado como este. De este modo, Ash podrá blandir su motosierra atravesando los cuerpos de los enemigos tanto como quiera, o bien quedarse a distancia y atacar con la escopeta hasta que estos caigan al suelo.

Destaca en este punto el modo de acabar con los enemigos. Después de atacarles durante un buen rato, empezarán a desprender un vapor verde que indica que podremos infligirles un golpe fatídico que acabe con ellos. Estos golpes finales harán gala de toda la chulería de Ash, y en numerosas ocasiones hasta gozarán de una pequeña secuencia que destacará el golpe.

También es posible acabar con los enemigos sin realizar estos golpes finales, pero resultará menos espectacular y más lento. Con muchos enemigos será necesario contar con la ayuda de Sam para acabar con ellos, ya que nuestro pequeño compañero podrá abrir sus defensas mientras Ash acaba con ellos, o bien atacar a los enemigos que se encuentran apostados en zonas elevadas lejos del alcance de Ash.

Gracias al poder del Necronomicom, en ciertas situaciones Ash podrá poseer a Sam y entonces el jugador controlará directamente al pequeño ser. En estas ocasiones será cuando, en el papel de Sam, se deberán solventar pequeños puzzles o atravesar zonas a las que sólo el pequeño personaje podrá acceder, ya que por su envergadura Ash no cabe por ellas. También puede convertirse en Evil-Ash, su versión oscura, gozando así de mucho más poder destructivo.

Digno de mención es el tutorial, que tiene lugar en la cabaña de las dos primeras películas, y que de hecho, viene a ser como una representación virtual de estas, reviviendo muchos momentos míticos de las mismas con tal calidad que todo aficionado sentirá algún que otro escalofrío o esbozará más de una sonrisa mientras avanza por este tutorial. Todo un guiño a los fans.

Posteriormente, todos los escenarios mantienen ese ambiente oscuro, pero lleno de carisma y humor negro, que hizo famosas a las películas. Desde el manicomio a los cementerios o las catacumbas, pese a no haberse visto con anterioridad en las películas, no desentonan con la idea que un seguidor pueda tener del universo Evil Dead.

Del mismo modo los enemigos, aunque estos sí que tienen una cierta inspiración en las películas. Los muertos tienen un aspecto fiel a lo visto en estas, aunque con más variedad, como cabría esperar. Los esqueletos, por su parte, parecen directamente sacados de 'El ejército de las tinieblas'. Y las nuevas criaturas creadas para la ocasión no desentonan dentro del aspecto general del juego.

Para empezar están los incoherentes diálogos entre Ash y Sam, que no dejan de hablarse y de decirse de todo, ya no sólo en escenas cinemáticas, sino también a lo largo del transcurso del juego. Además, Ash puede patear a Sam hacia una canasta de baloncesto y luego alegrarse de haber encestado. También son para destacar escenas como en la que el mal sube en ascensor y se impacienta debido a su lentitud.

El apartado sonoro está muy trabajado, gracias sobre todo al excelente trabajo de doblaje realizado. Bruce Campbell vuelve a poner voz una vez más a Ash, mientras Ted Raimi, hermano del director Sam Raimi, será el encargado de dar vida a Sam. Las risas y sonidos especiales son idénticos a lo de las películas, mientras que las melodías podrían haberse pulido un poco más, pero cumplen su función.

En cuanto a la jugabilidad, los personajes responden bien a las instrucciones del mando de control, y son bastante sencillos. El juego resulta divertido, pero puede llegar a cansar por momentos, además de que no es excesivamente largo, por lo que en un par de días se puede llegar a completar sin demasiada dificultad. Por supuesto, para los aficionados, habrá numerosos extras escondidos en los escenarios para desbloquear.