Gaming Club
Regístrate
españaESPAÑAméxicoMÉXICOusaUSA

Actualidad

Motivaciones y dificultades para volver a un videojuego

¿Es posible a día de hoy?

Actualizado a

Regresar a un videojuego finalizado, una tarea cada vez menos frecuente

En 2017 se batieron récords de publicaciones de videojuegos en Steam, concretamente 7672 títulos. Si hacemos un cálculo rápido nos da de media unos 21 lanzamientos al día, cantidad inabarcable para cualquier ser humano.

Son cada vez más los videojuegos que llegan a cada plataforma y con más contenido: que si side quest, modos multijugador, DLC… Las compañías afrontan ahora cada producción como un servicio a largo plazo y no como un producto con inicio y final; ahora ese final lo dicta el propio jugador, posiblemente siempre remplazando ese título por otro que cubra sus intereses en el momento en que decida decir adiós al que tantas horas ha dedicado.

Ampliar

Fast food digital

Es por eso que, con una tendencia tan dada al consumo-remplazo, se hace cada vez más frecuente apilar juegos en la lista de pendientes o, lo que es tema principal de este artículo, la imposibilidad de regresar a ciertos videojuegos que en su momento nos dieron grandes momentos.

Es común ver en Twitter listas de personas que comparten sus juegos completados en ese año, listas donde aparecen los lanzamientos pendientes que, por un motivo u otro, no pudimos disfrutar cuando quisimos. La realidad dice que un gran porcentaje de esos títulos, aspirantes a ser nuestro próximo bocado, nunca pasen por nuestra consola; o si lo hacen, sea dentro de mucho tiempo en forma de remasterización, emulación…

Estamos inundados de videojuegos, con ofertas que reducen el precio de los títulos en ocasiones a la mitad después de un mes desde su lanzamiento, abriendo así el abanico de posibilidades de compra y la facilidad de acceso para la mayoría.

El precio de los juegos de lanzamiento, algo está fallando

Ampliar

La pescadilla que se muerde la cola

De este modo, ¿cuándo es el momento oportuno para volver a ese título que prometimos recuperar algún día?

Pongamos un ejemplo: a finales del pasado verano compramos ese título de conducción que tantos meses llevábamos esperando. Después de dos meses de juego diario y cerca del 80% de todos los desafíos complicados, llega otro título –pongamos un RPG­– que nos hace depositar todo nuestro interés en él, pero hacemos la promesa de volver en el futuro al simulador de coches. Ahora, meses más tarde, ¿hemos vuelto?

Vuelta a empezar: porque posiblemente cuando terminamos ese RPG o estábamos a punto de hacerlo apareció un tercer título que obligó a repetir la tendencia, de introducir otro elemento a nuestra lista que nos haga poner toda nuestra atención, impidiendo que ese juego de coches inicial vuelva a estar presente en la pantalla.

Ampliar