MeriStation y 19 Reinos: Nuevas recompensas monetarias

¡Saludos, queridos huéspedes! Bienvenidos a La Doncella Hendida, el más famoso burdel de todo Poniente. Pues sí, tras mi aventura religiosa, he decidido regresar a mis orígenes, y es que por desgracia esto se acaba, al menos por la presente temporada, así que hay que despedirse con todos los honores. Eso sí, el atril he decidido conservarlo para mis charlas. Me da un aire así como de gran señor, ¿no creéis? También está teniendo mucho éxito entre los clientes, todos piden alquilarlo para subírselo a las habitaciones. No sé qué harán con él allí arriba, aunque dadas las manchas sospechosas con las que siempre lo devuelven, y el olor aún más sospechoso que emanan dichas manchas, me lo puedo imaginar. Berta se pone hecha una furia cada vez que tiene que limpiarlo, y bueno, es comprensible porque… Buagh, esta mancha se la ha dejado, y todavía está pringosa. Bertín, hijo, tráele a tu padre algo para lavarse las manos.

Bien, como iba diciendo, la guerra se acaba. El próximo lunes todo termina, y es una lástima, la verdad. Según Berta, que es la que lleva los números, el negocio ha crecido bastante desde que comenzó todo en 19reinos.com. Por desgracia, nuestro estimado Consejero de la Moneda, Ristobal Monteoro, se ha enterado y nos ha subido los impuestos un 300 por ciento; para que no nos gastemos el dinero en vicios, según dice, y es que este hombre siempre piensa en el bienestar del contribuyente. Así que me temo que además de regentar el burdel tendré que empezar a pensar en trabajar en él de forma directa, para al menos cubrir los gastos que… Ah, gracias hijo, ya puedes llevarte la palangana. Bueno, no quiero aburriros más con mis problemas. Tengo una sorpresa final que sin duda os gustará, pero antes, el parte semanal. ¿Dónde he puesto el pap…¿Por qué tengo las manos amarillas…? Y huelen a… ¡Bertín! ¡¿Pero es que nunca aprendes?! ¡El contenido de las palanganas y escupideras se echa a la fosa, no se usa para… Sí, ya sé que siempre te digo que hay que aprovecharlo todo. ¡Pero esto no… Ah, déjalo, me rindo. Hoy es el último día, terminémoslo lo mejor posible.

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En fin, el parte, recién llegado del Palacio Real. Cuerdasflojas, toca algo solemne… Bien, cito textualmente: “Tras los recientes hechos acaecidos en el seno de la casa Borbón, con nuestro monarca Juan Carlos I, apodado el Mataelefantes, tomando la decisión de abdicar y ceder el trono a su hijo Felipe VI, todavía sin apodo, se ha decidido por unanimidad (la nuestra, se entiende, no la del pueblo, que para algo somos nosotros los que dictamos las leyes) otorgar a Don Juan Carlos el nuevo cargo de reyrenelarísimo, pues no solo salvó al reino en innumerables ocasiones, sino también al mundo entero. No en vano, recientemente se ha descubierto una complicada y oscura trama urdida por los elefantes africanos, quienes conspiraban en secreto para invadir el planeta y esclavizar a la humanidad, algo que nuestro monarca impidió al enfrentarse en solitario a tan aterrador enemigo, en una lucha desigual y sangrien…” ¿Qué? ¿Qué pasa Berta…? Oh… Sí, es verdad, me he equivocado de comunicado. Necesito beber algo, hace tiempo que no bebo algo. Pero me da miedo pedírselo a Bertín… No, pedírtelo a ti me da más miedo todavía. Pero bueno, trae acá. Lo que no mata, remata… Umm, no está mal. ¡Casi sabe a vino!

¿Sabes qué? A los Siete Infiernos. Odio los guiones, me gusta improvisar. Bien, mis queridos huéspedes, se acerca el final, no sé si lo he dicho antes. El 9 de junio acaba la guerra. Da igual quién gane, lo importante es participar. Por supuesto, la casa ganadora pasará por la espada a todas y cada una de las casas que han sido sus rivales. Otro traguito, que se me seca la garganta… Pero lo hará por el bien del reino y por mantener la paz del rey, así que no hay por qué tenérselo en cuenta. Aquí en el burdel han sido unas semanas muy entretenidas. Sigo sin saber qué es eso del XP, pero por lo demás, la experiencia ha sido muy enriquecedora. Espero que el ganador se acuerde de mí y me mande un maestre. Siempre he querido tener uno... Berta, tráeme otro pellejo de esto, que se ha acabado… Qué demonios, tráeme el barril entero…

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Lo dicho, me congratula veros a todos aquí, semana tras semana, hermanados por la causa común y universal de darle gusto a la sinhueso. Además, han sido muchas las pertenencias que mis chicas han robad… Err, que diga, que mis chicas han recogido al haber quedado olvidadas en las habitaciones superiores. Yo no me he quedado con nada, que conste. Y si resulta que mi cuenta corriente en el Banco de Hierro de Braavos ha crecido un diez mil por ciento desde que comenzó la guerra, es mera casualidad, no ha tenido nada que ver con mi cargo. En fin, mejor vamos acabando, que la lengua se me empieza a soltar demasiado. Como despedida, os ofrezco tres de las bolsas que han dejado olvidadas los clientes. Apuntad los códigos para obtenerlas: CGB83 para la de oro; 96FAJ para la de plata; y TE7BN para la de bronce. Bueno, queridos huéspedes, recordad que aunque la guerra termine, La Doncella seguirá abierta para vuestro uso y disfrute… Umm, eso ha sonado mal de cara a las redes sociales, espero que no tengamos problemas. Y recordad: En La Doncella Hendida no servimos gigantes.